en un poema, unidos por ambos sexos, dos seres cualquiera crujen bajo el peso de la existencia del ser humano entero. sujetan una parte del mundo con cada palmo cuadrado de su inverosímil bomba interior. sangran y discuten. levantan acta del grosor de sus brazos y cada pérdida de un recuerdo es un vómito desesperado. y envidian a los perros porque dios los ha creado y no les fuerza a elegir. y detestan a los muertos por su olor a podredumbre. y por su libertad los admiran.y tienen, uno y otro, una esperanza. pero es la única que les queda.
fotografía de marco antonio raya.
música de a new silent corporation.
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5 comentarios:
un gustazo leerte, como siempre
Bárbaro.
te odio y te celebro
me pongo a sus pies. si es que...ains, no podía ser de otra manera.
besos y abrazo
gracias apañaos y apañás. :)
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